lunes, 12 de mayo de 2014

Otra maravilla de libro infantil



José Cruz Cabo
La Fundación Conrado Blanco ha presentado en León, el sexto libro de la colección Charín, una maravilla de textos de varios poetas, y de preciosos dibujos de Fernando Noriega.
Este sexto tomo comienza con un proñogo del bañezano y Patrono de dicha fundación, el procurador Eugenio Santos Isla, quien explica con un verbo tierno y elegante, los fines de este libro, que son que la “verdadera patria del hombre es la infancia y que el futuro, que aguarda custodiado en cada niño, hay que conformarlo”, según encomendaba nuestro gran Cronista y Mecenas, Conrado Blanco González.
El texto lo abre una preciosa poesía, dedicada a Conrado, de Máximo Cayón y le sigue un texto del presidente de la Fundación, del bañezano y notario jubilado, Eugenio de Mata Espeso.
Continua el libro con varios pequeños relatos de Eugenio de Mata, Luisa Arias, Arturo Cabo, Maria Oliva Fernández, Miguel Angel González, Eugenio Santos, José Luis Ramos y Alejandro Valderas, titulados “Conrado con Charín”.
María del Camino Ochoa Fuertes, directora del libro, hace una magnífica presentación de esta antología  titulada “Corazón de Sol”, en el que explica que los corazones poéticos nacieron  del amor de Conrado hacia su esposa fallecida Charo González.
La `primera parte del libro contiene varias poesías de la ganadora del sexto premio nacional de poesía infantil “Charo González”, que fue Rosa Diaz, escogidos de algunos de sus varios libros de poemas. En la segunda parte se insertan poesías de varios autores, como Carlos Reviejo, Blanca Estela Sánchez,Ana María Remero, Raquel Lanseros, Fernando Noriega y Restituto Núñez, en los que los lectores podrán disfrutar  de maravillosos poemas, adaptados a todas las edades.
En la tercera parte, los poemas están dedicados a las “Navidades en primavera”, de Carlos Reviejo, Antonio Murciano y Apuleyo Soto. 
La parte cuarta, es el “Aula de expresión poética”, a cargo de la directora de este libro, María del Camino Ochoa Fuertes, en la que se destacan las maneras que se pueden emplear para leerlas y comentarlas, para que los niños puedan saborearlas mejor e infundirles la pasión por la poesía, con apartados muy originales y que los niños tienen que comentar y jugar con las mismas. También termina diciendo que “la colección se orienta  hacia la poesía infantil, conscientes  de que si se cultiva la sensibilidad poética en los primeros años de vida, queda prendada del alma para siempre”. El libro finaliza en la guarda última, con otra poesía de Fernando Noriega, en la que recuerda a Conrado y pide disculpas a los maravillosos poetas que le acompañan en la antología que comentamos “Como mejor solución para sanar las heridas y como reacción lógica, ante el frio y el miedo”.

No hay comentarios: